Delegar una parte de tu negocio a otros profesionales especializados, psicológicamente, no es una tarea fácil a pesar de ser, sin duda, lo más correcto.
Por ello, una de las cosas que más ansía un cliente que decide contratar los servicios de una agencia de azafatas es, además del objetivo material como reforzar la imagen de marca o aumentar las ventas, sentir la tranquilidad de que todo está bajo control y que esta parte de su negocio está en las mejores manos, en otras palabras, necesitan confianza.
Por eso, hoy nos centramos en explicar una parte del proceso que TEMA lleva a cabo desde hace más de 35 años y que ninguna otra agencia hace hoy día, la supervisión humana de todas sus azafatas.
¿Por qué es importante la supervisión de las azafatas?
Supervisar cualquier tipo de trabajo es básico para asegurarnos de que se está realizando de la forma correcta y, sobre todo, para que, en caso contrario, se puedan corregir los errores a tiempo.
Si, además, el trabajo implica un factor humano, la supervisión se vuelve mucho más imprescindible pues, como todos sabemos, errar es de humanos y en algo tan delicado como es el trabajo de las azafatas del cual depende la imagen de una marca o el aumento de ventas de un producto, un fallo puede constituir un verdadero problema.
En TEMA, además, vamos más allá pues, a pesar de los grandes avances tecnológicos de nuestra era que nos permiten llevar un control muy exhaustivo de cada uno de los procesos que forman el marketing integral, no nos olvidamos de lo importante que es para la tranquilidad y confianza de nuestros clientes que exista una mano humana que supervise todo in situ.
Es por esto que TEMA realiza una supervisión de las azafatas en el punto de venta, congreso o evento que se esté realizando para cada uno de nuestros clientes, llegando, en tan solo un mes, a realizar más de 900 visitas de control que suponen el valor añadido de nuestra marca.
¿Cómo beneficia la supervisión local de las azafatas?
Este tipo de supervisión humana y local de nuestras azafatas supone para nuestros clientes un beneficio inmediato, tener presente siempre que todo está bajo control y que cualquier error que pueda surgir será corregido de inmediato.
Todas las directrices de nuestros clientes para sus campañas serán llevadas a cabo a la perfección y la supervisión local de las azafatas es un aval de ello.
Por otro lado, esto es una ventaja para las propias azafatas que se siente arropadas, protegidas y respaldadas en todo momento sabiendo que, ante cualquier situación, siempre hay un equipo humano detrás.
Esto hace que nuestras azafatas acudan a sus puestos de trabajo con una mayor seguridad y se traduce en un mejor rendimiento en el trabajo, a mayor comodidad, mayor es el esfuerzo por seguir perteneciendo a este equipo de profesionales y mejores son los resultados, algo que repercute directamente en beneficios para nuestros clientes.
Puedes preparar y tener la mejor campaña promocional, las mejores azafatas o promotoras y el mejor stand o punto de venta del momento, pero, sin la supervisión, cualquier error por pequeño que sea puede marcar la diferencia entre una campaña exitosa de aquella que nunca lo fue.
Como puedes ver, no controlar puede resultar muy caro.
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